Expirado
Reflexiones Cátedras

Amplia participación de la sociedad para reconstruir las bases de la convivencia

Mons. Agustín Radrizzani, obispo de Lomas de Zamora, miembro de la Comisión Permanente de la Conferencia Episcopal Argentina, explicó la experiencia del Diálogo Argentino en la Cátedra.

La participación, este encuentro, dan visos de esperanza. Cuando concluyó Fernando Laborda, le dije a Miguel Lifschitz: “Menos mal que está usted aquí, que representa a los políticos en este momento, porque entonces quiere decir que no todos los políticos son deleznables, que tenemos gente que se está deslomando, que está trabajando”. Entonces por un lado cuenta la participación de cada uno de nosotros en el ámbito en que le toca actuar, y por el otro hay que desencadenar procesos. Creo que en Rosario hay un aire distinto, estoy convencido que desde el 2001 la Argentina ha cambiado.

Carmelo Angulo Barturen, que fue Representante de las Naciones Unidas, nos dijo: “ustedes no saben lo que es la Argentina, es un país maravilloso, estupendo”. El se metió con alma y vida en todo este proceso de diálogo que vamos llevando adelante. También nos dijo: “ustedes tienen una riqueza cultural impensada, insospechada, una riqueza natural que es fantástica, una riqueza de relaciones humanas”. Entonces quiere decir que se puede mirar ese medio vaso lleno.

Nosotros tendríamos que seguir avanzando pero me parece importante detectar objetivos, como por ejemplo el bien común y poder establecer puentes en la medida de las posibilidades. Les hago una referencia muy personal. Mi mamá me pregunta: ¿seguís con el Diálogo Argentino? La viejita -tiene 81 años- me dice: ¿qué vas a hacer con el Diálogo? ¿Qué se piensan que son ustedes? Le contesto: “mami, no me entusiasmes tanto”. Entonces me dice: “mirá, mientras los que reciben 10.000 pesos de sueldo, sigan haciéndolo, no les importará nada de lo que digan ustedes”. 

Entonces yo le digo: “Sí, es verdad, vos tenés sentido común, pero también creo que hay una conciencia en la Argentina. Por ejemplo, el cuestionamiento al mundo político”. Hace cinco años eran poquísimos los que lo hacían, y en este momento está muy difundido. Como también lo está seguir avanzando en la educación, en políticas de Estado, en un proyecto de país, en saber hacia dónde vamos, qué pretendemos, qué queremos. Eso en el Diálogo se le ha dicho al entonces presidente Duhalde y lo sabe el presidente Kirchner, se lo hemos dicho explícitamente a Aníbal Fernández, a la hermana del presidente, a la esposa del presidente y a Alberto Fernández. ¿Cuál es el proyecto? ¿Hacia dónde caminamos? ¿Cuál es el proyecto político, el proyecto económico y el proyecto social?

Es como cuando de noche nos despertamos y escuchamos al mosquito volar. No sé si a ustedes les pasará, pero yo hasta que no prendo la luz y no lo liquido, no sigo durmiendo. Entonces eso es lo que se está desencadenando en la Argentina, esos son datos para mi positivísimos. Es que hay un aire distinto entre nosotros.

Lo el ideal es llegar a estos diálogos a nivel municipal, provincial y nacional, en todos los estamentos. En este momento tenemos diálogos en más de diez provincias con diversas modalidades; algunos los propician más los credos, otros los propician más las ONGs, y por ejemplo en Tierra del Fuego es el mismo gobernador el que lo lleva adelante. Todos aquellos que quieran intervenir pueden llamar por teléfono a la sede de Caritas.

No es sencillo, se avanza lentamente, primero porque tenemos una cultura individualista. Por ser creyentes, estamos hechos a imagen de un dios trinitario, y entonces en tanto funcionamos como comunidad nosotros encontramos la alegría de vivir, y no cuando vivimos en un individualismo enfermizo.

Les digo tres cosas que me parecen fundamentales. La primera es que el joven de hoy, sobre todo en los estamentos más populares, es incapaz de seguir un razonamiento lógico. Entonces si le decimos: pasa esto, y estas son las consecuencias, fijate qué te puede pasar, te cierra la persiana o no te escucha, o si tiene mucha confianza dice “no me molestes”. No es capaz de mantener un razonamiento. Todos nosotros somos capaces de hacerlo. Fíjense que las exposiciones que escuchamos han sido todas de líneas deductivas. Es decir, presentan sus ejemplos, su experiencia, la reflexión y después dicen las consecuencias. El joven de hoy eso no lo puede hacer.

Segundo, resulta impactante que el joven, sobre todo en los estamentos más humildes, es incapaz de mantener por largo tiempo una opción. Ustedes conocerán muchachos que están comenzando la tercera carrera. Comienzan y dejan. Son muchísimos los universitarios que en tercer año dejan de estudiar, porque no pueden mantener una opción por largo tiempo. Piensen la repercusión social que eso tiene para el compromiso ciudadano, el compromiso familiar y el compromiso de una vida de total entrega.

Tercero, han aumentado notablemente a nivel mundial y a nivel nacional los niveles de suicidio, que expresa una falta de interés por la vida. De ahí la preocupación grandísima de Juan Pablo II, con todas las cartas encíclicas y las intervenciones sobre el tema de la vida. Porque la vida en este momento no vale nada. De hecho, los chicos, cuando te piden un cigarrillo, te dicen pasame el cáncer. No les interesa. Después cuando llega el momento, llega el drama. No les interesa tampoco la posibilidad del sida. Para nosotros la vida era como el vértice de la pirámide; hoy en día, el vértice de la pirámide es gozar. Por eso aludía también a la falta de compromiso y de esfuerzo. Eso no interesa, porque se preguntan ¿a qué lleva?

Esto nos va dando un panorama distinto y entonces cuando me preguntan si se puede intervenir en el Diálogo Argentino digo que lo planteamos a largo plazo.

Después de que haber escuchado al intendente de Rosario, a quien conocí en esta reunión, me parece que hay dos puntos que son fundamentales: se nota que tiene pasión por lo que hace, que trata de hacer las cosas bien. No estoy hablando de Jesucristo ni del Evangelio ni de los mandamientos, sino de tratar de hacer las cosas bien. Eso es lo que me parece que está fallando en nuestra sociedad. Y también poner pasión en lo que se hace. ¿No notaron ustedes ese deseo de hacer las cosas bien? Y por otro lado, ser un caballero, ser un hombre correcto. Eso es de lo que se adolece en nuestra patria.

Con la fe religiosa, la Mesa del Diálogo es algo espléndido. Tenemos la comunidad hebrea, la islámica, la evangélica y la católica. Queremos defender los valores y ahí nos sentimos todos aglutinados.

Le quiero agradecer a estos cuatro hermanos nuestros que hablaron en esta Cátedra, por la pasión que ponen en lo que hacen, porque se nota que dieron lo mejor de sí y que tratan de hacer las cosas bien. Eso me parece que es hombría, caballerosidad, sentido de responsabilidad y si eso se va multiplicando, al final es una revolución en cadena. Estoy convencido que son muchos más los que quieren una Argentina distinta que los que quieren una Argentina vieja, pero nos tenemos que unir.

El “Diálogo Argentino”

El “Diálogo Argentino” es un espacio que mediante la amplia participación de la sociedad busca contribuir a la reconstrucción de las bases para la convivencia social frente a la profunda crisis política, institucional, económica y social que sufre nuestra Patria.

Historia

  • Ya en diciembre del año 2001 la Iglesia emitió un comunicado “El diálogo que la Patria necesita” en vistas a superar la crisis.
  • El 14/1/2002 el Presidente Duhalde hizo una convocatoria al Diálogo Argentino. La C.E.A. brindó el espacio espiritual de la Iglesia Católica y tuvimos el apoyo técnico del P.N.U.D. Fueron 3 los objetivos:
    1. Lograr la participación de las distintas fuerzas para enfrentar el derrumbe que nos ponía en el límite de la anarquía y violencia fratricida.
    2. Encontrar soluciones concertadas para el mediano y largo plazo.
    3. Trabajar en la definición de un proyecto nacional sustentable.
  • Se dieron 3 etapas:
    1. Reuniones bilaterales con actores de los diversos sectores de las sociedad. Se elaboró el documento “Bases para el Diálogo Argentino”.
    2. Experiencia de concertación con las mesas sectoriales y “Diálogo en las Provincias”.
    3. Se elaboró el documento “Bases para las Reformas” 11/VII/2002.
  • Resultados positivos: - Recuperación del diálogo.
    - Contribución a la pacificación.
    - Atender a la emergencia social.
    - Identificación de consensos básicos.
  • El 18/X/2002 se realizó la primera reunión de la Mesa ampliada del Diálogo Argentino. Tuvo una amplia representación de la sociedad civil = diversas confesiones y credos, las ONG’s, entidades empresariales y trabajadores. Cambió la sede por dejar de prestar PNUD la asistencia técnica.
  • Síntesis de los avances en políticas de estado.

    Propuestas

    Las hay en el plano político, social, económico, institucional y sindical.

    Contribución a la trasparencia.

    El reclamo de justicia y el fin de la impunidad es particularmente exigente en nuestra sociedad. Por eso entre otras iniciativas, se propone la presentación de la declaración jurada de toda la dirigencia y de todo funcionario público.

    Lecciones aprendidades

  • El D.A. ha servido para disminuir la violencia política y favorecer la búsqueda de consensos.
  • El D.A. ha contribuido a superar la puja sectorial y partidaria fijando políticas de estado.
  • El D.A. ha contribuido a respaldar las instituciones frente a un gran desprestigio de los actores políticos.
  • El D.A. impulsó la participación de toda la sociedad y esto regeneró la confianza y reconstruyó el tejido social. Esto impulsó el cambio de la cultura política dominante.
  • El D.A. debe contar además de las organizaciones sociales, civiles, también con actores políticos con poder de decisión.
  • El D.A. necesita recursos humanos y financieros para hacer sustenible el trabajo. Necesita asimismo el apoyo constante de los M.C.S.
  • El D.A. debe buscar una amplia participación de todos los actores.
  • La evaluación ha de ser constante para reorientar objetivos y métodos.
  • Debe finalmente integrar demandas sociales y exigencia económicas.

    Para el futuro

  • Establecer un programa de “cultura de diálogo” que de cabida y comprometa a todos los actores de la sociedad civil y los credos que lleve a superar el actual predominio de la cultura de la confrontación. La tarea fundamental hoy es presentar valores de confianza, honestidad y dedicación al buen común.
  • Contar en todo momento con un diagnóstico social actualizado que acompañe el proceso de recuperación de la crisis. Se requieren nuevos incentivos para que la sociedad civil quiera intervenir y haga planteos sensatos.

    Dos grandes líneas de acción

  • Retomar el diálogo multiactores.
    La sociedad civil que conforma el D.A. no alcanza a dar respuesta a los problemas estructurales que dieron origen en la crisis al D.A. y una vez fortalecida la confianza entre los actores sociales, se debe ampliar el espacio a otros sectores y actores.
    - Institucionalizar un espacio que puede ser la creación de un “Consejo Económico y Social” en la Argentina (organo de consulta del Poder Ejecutivo y Legislativo) para debatir los problemas económicos y sociales sustanciales.
    - Crear un espacio de confianza para detectar legítimas inquietudes y posiciones sobre temas institucionales. Acercar a actores sindicales y empresarios.

    Federalización

    Elaborar mecanismos para profundizar la experiencia del diálogo en el marco de una democracia participativa. Asimismo conformar un equipo que pueda desarrollar un proyecto sustentable en algunas regiones del país. Vincular las experiencias entre si para generar la cooperación. 

    Conclusión

  • Experiencia única y fecunda.
  • El objetivo es construir ciudadanía. El Diálogo nos aproxima a la verdad.
  • Es un espíritu y no puede transformarse en institución.
  • El problema social es grave. Es urgente implementar encuentros con empresarios, gremialistas, piqueteros y actores emergentes.
  • Es un instrumento de carácter democrático. Hace a la cultura de la paz, el consenso y a la participación.
  • Se logra con el esfuerzo de todos.

CÁTEDRA ABIERTA DE RESPONSABILIDAD SOCIAL Y CIUDADANA